Matrix, ¿la verdadera realidad?

Desde la primera película de la franquicia, Matrix se convirtió en un referente de dos temas viejísimos de la historia de la filosofía: 1. ¿Somos libres?, y 2. ¿Lo que vemos es la verdadera realidad? Aunque éstos pueden parecer abstractos y difíciles de responder, han tenido intentos de respuesta con los que de seguro has tenido contacto.

Platón y su caverna

El famoso mito de la caverna de Platón se encuentra en el libro VII de la República, en él se menciona que la condición natural de los humanos es la de estar encadenados mirando fijamente a sombras que consideramos como “figuras reales” (esto es, la materia). La labor filosófica consiste en librarnos de esas cadenas y alcanzar la superficie (es decir, salir de la caverna o el mundo material). Sin embargo, como nuestros ojos no están acostumbrados al destello del sol, nos arderán antes de que nos acostumbremos a ver las cosas “tal y como son”, en otras palabras: las ideas.

Descartes y el “cerebro en la cubeta”

En la obra Meditaciones metafísicas, el filósofo francés del siglo XVII René Descartes propone una hipótesis llamada “genio maligno”, el cual nos engaña sistemáticamente, como una forma de encontrar una manera de no dudar absolutamente de la realidad de lo que hacemos, vemos, tocamos, pensamos, etc. A esta revisión contemporánea se le conoce como “cerebro en la cubeta”, en la que, al igual que Neo al entrar a la Matrix, uno se pregunta si es posible separar el cerebro del cuerpo de una persona, ponerlo en una cubeta y conectarlo a una computadora para hacerle creer que lo que piensa, ve, siente, etcétera, es “real”.

Esta versión de la Matrix, al igual que la caverna de Platón, pone en duda la “realidad empírica” (el cerebro) de la “realidad virtual” (la computadora).

Grinberg y la Lattice

Una última interpretación de este problema se la debemos a un neurofisiólogo mexicano llamado Jacobo Grinberg, que acuñó en el 94 un concepto conocido como Lattice (en inglés: “enrejado”) y que coincide con la estructura de la Matrix: una serie de complejos sistemas de codificación a los que comúnmente no tenemos acceso. Grinberg propone que aquellas personas que se dedican a la meditación, al chamanismo o al misticismo pueden acceder a estas formas intrincadas que componen el tejido de la realidad que vemos (si bien no en su totalidad), esto debido a que los estados alterados a los que alcanza a llegar su cerebro “decodifican” lo existente. Digamos que estas personas serían “iluminadas” en el sentido en el que lo decimos de alguien que ya acudió a terapia a resolver sus problemas.

Por otra parte, ¿sigues pensando que nuestra realidad no es la material? ¡Hay más respuestas a esta pregunta y te las traeremos pronto!